Regulación emocional
¿Cómo superar la tristeza?
La tristeza es considerada una emoción negativa, sin embargo ninguna emoción es negativa de por sí. Las emociones están ahí para darnos información del exterior y nunca debemos reprimirlas, sino darles la bienvenida, interpretar el mensaje que nos traen y extraer el aprendizaje que nos quieren aportar.
La tristeza nos habla de que hemos padecido una pérdida, puede ser una pérdida grave -como la pérdida de un ser querido- o algo menos grave -como que nos deje la pareja, que perdamos el trabajo, que perdamos algo material, etc.
Cuando sentimos tristeza tenemos que verificar si se trata de una tristeza que se ajusta a la situación del momento y por lo tanto tiene que ver con algo que nos ha pasado en la actualidad o si, por el contrario, se debe a algo que arrastramos del pasado. En este segundo caso, se trata de una tristeza más complicada de superar, ya que la hemos retroalimentado a lo largo del tiempo, pero -tranquil@s- también tiene solución.
cómo superar la tristeza
En primer lugar hay que entender que toda tristeza conlleva un proceso de asimilación de la pérdida. Ha este proceso le llamamos duelo. El duelo tiene varias etapas:
- En la primera etapa, se da la negación de la realidad, nos resistimos a creer lo que está pasando.
- En la segunda etapa, se da el enojo, nos enfadamos con nosotros mismos o con los demás porque no nos gusta lo que está sucediendo y querríamos haber podido evitarlo.
- En la tercera etapa es cuando tocamos fondo, es cuando experimentamos lo peor de la tristeza, los síntomas más físicos -dolores de cabeza, calambres, falta de hambre, apatía, llanto, desmoralización, desesperación, etc. Esta etapa es peligrosa, ya que si no la superamos, podemos entrar en una depresión. En esta etapa, si retroalimentamos la tristeza con pensamientos negativos, es muy probable que nos encerremos en un bucle sin fin.
- Después de tocar fondo hay que salir adelante, en esta etapa la invitada es la «aceptación». Empezamos a superar la tristeza cuando aceptamos que las cosas son como son y que no podemos cambiar las vicisitudes de la vida, pero que nuestra vida sigue y tenemos que levantar cabeza y seguir adelante. En esta etapa es muy importante aderezar nuestros pensamientos con una pizca de optimismo y creatividad, para lograr sacar recursos de la manga y buscar lo que nos hace falta para salir de la tristeza. Algunos recursos pueden ser: la terapia, practicar un hobby, rodearse de gente que nos quiere y cuya compañía nos sienta bien, hacer voluntariado… y otras actividades que nos llenen.
- La última etapa es la del aprendizaje. Poco a poco, si te permites reflexionar al respecto mediante la aceptación, podrás extraer un aprendizaje de la experiencia pasada y así podrás salir adelante con mayor seguridad y confianza en ti mism@.
A tener en cuenta:
Permítete pasar las etapas del duelo.
No retroalimentes la etapa de tocar fondo. Duele, pero el dolor solo pasará si lo sueltas.
Usa el optimismo y la creatividad para salir adelante, te lo mereces.
Ten en cuenta a aquellas personas que pueden servirte de ejemplo porque han superado una situación similar o peor que la tuya. De todo se sale, si estás dispuesto a hacer el esfuerzo de salir.
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