Regulación emocional
Reduce el estrés con cuatro trucos sencillos
La vida está llena de momentos en los que nos supera la carga emocional y tendemos a descargarla abruptamente sobre el que menos se lo merece. Nos vamos llenando de emociones negativas, como un volcán cuya lava va subiendo y subiendo hasta la salida, hasta que el volcán entra en erupción y escupe todo lo que lleva dentro arrasando con todo a su paso. ¿Qué pasaría si hubiera una forma de ir disolviendo esas emociones en vez de acumularlas? ¿Y si pudiéramos ir despojándonos de ellas de modo que no llegáramos a crear la carga emocional que nos haga explotar? Suena bien, ¿verdad?
Con unos sencillos trucos que podemos realizar a lo largo del día, lograremos despojarnos del estrés y la negatividad excesiva.
1. respirar es un arte
Respirar es algo que hacemos todo el tiempo, así que puedes aprovechar cualquier instante del día para este menester. Pero vamos a probar una respiración consciente que consiste en inspirar profundamente y luego expirar haciendo que nuestra expiración dure el doble de lo que ha durado la inspiración. Repetimos 10 veces y estaremos como nuevos, los niveles de serotonina se habran incrementado en nuestra sangre. Prúebalo, te sorprenderás.
2. Relajación muscular de Jacobson
Es una técnica de relajación bien sencilla: sentado o tumbado ves contrayendo y soltando los diferentes grupos de músculos. Por ejemplo, puedes empezar por contraer los brazos, hombros y manos, cuentas hasta 15 y luego sueltas. A continuación contrae la espalda, el pecho y la barriga, cuenta hasta 15 y luego suelta. Sigue contrayendo los gluteos y las piernas hasta los pies, cuenta hasta 15 y después suelta.
Tardarás, menos de 2 minutos en hacerlo y habrás reducido tus niveles de estrés, ¿no es estupendo?
3. diez minutos de caminata rápida
Diez minutos de ejercicio físico rápido, puedes correr, ir en bici, caminar o hacer elíptica, todo vale. La rapidez es la clave, así acelerarás tu ritmo cardíaco y contribuirás a soltar estrés.
Una vez al día y como nueva.
4. Usa la palabra para crear tu realidad
Coge un papel y un boli y escribe todas esas emociones negativas que sientes (enfado, desilusión, nervios, odio, estrés…) arruga el papel y tíralo a la basura. Ahora coge otro papel y escribe las emociones que te hacen falta para tener un día estupendo (plenitud, calma, armonía, paciencia, conciencia, amor…), guarda el papel en tu cartera. Y al menos 4 veces al día recuerda mentalmente esas emociones positivas que necesitas para que te recarguen las pilas por completo. Puedes acompañar ese recuerdo con una maravillosa sonrisa. 😉
Cuatro sencillos trucos que no te quitan mucho tiempo y no te cuestan dinero.
Primer secreto, AQUÍ.
Segundo secreto, AQUÍ.
Cuarto secreto, AQUÍ.
Recuerda, nunca es demasiado tarde…
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